José (Joseph) CASCALES SÁNCHEZ (12/01/1925, Abanilla). Era hijo de Pedro y Antoinette Sánchez. Tenía los ojos marrones claros, medía 1’68. Era agricultor. Estaba casado y tenía un hijo. Residía en Roquessels (Hérault). Todo parece indicar que llevaba tiempo establecido en esta zona junto a su familia[1]. Era, por tanto, una familia de emigrantes económicos. Conviene destacar que, tanto en esta localidad como en otras circundantes, hay gran cantidad de murcianos procedentes de Fortuna y Abanilla. Roquessels queda en la zona de actuación de la 11ª Brigada de Guerrilleros. José obtuvo la naturalización el 5 de septiembre de 1946.
La información sobre José es bastante incompleta hasta el último tramo de su vida. Tramo que estuvo marcado por el infortunio que acompañó a muchos extranjeros durante el periodo de guerra, 1940-1944, y los años siguientes. José, como otros muchos españoles, entró a formar parte de la Resistencia[2], carta FFI 226, en la localidad en la que residía, aunque no hay fecha de su ingreso, ni registro de la unidad en la que se incorporó inicialmente. Su alias era “Guy”. Todo indica que lo hizo en el Grupo Cabrol de los Cuerpos Francos de Béziers. Grupo que se centró entre 1943-1944 en la ejecución de los planes de sabotaje preparatorios a la Liberación (plan de sabotaje de instalaciones eléctricas, -Plan Azul- y plan de sabotaje de vías férreas -Plan Verde-), sus operaciones se cuentan por centenares. La presencia española fue importante. Los efectivos oscilaron entre los 30 de 1943 y los 400 de agosto de 1945.
El único dato disponible, sobre este periodo, nos informa de su participación en las operaciones de liberación del sector de Bedarieaux-Faugères. En esta batalla estuvieron presentes, además de combatientes locales de los Cuerpos Francos de Liberación, algunos efectivos del Maquis Bertrand y del maquis de Vernazoubre.

Fuente: AD Hérault, FONDS FRANCIS JOUVIN, ALIAS «CAPITAINE CABROL» (1900-2009), FRAD034_220J_4_00019
Acabadas las operaciones de Liberación de Béziers, José formalizó el ingresó en la 2ª Compañía de los Grupos Francos de Combate, Grupo Cabrol, para continuar luchando contra los alemanes integrado en el ejército regular. El enganche se firmó en el cuartel de Duguesclin el 1 de septiembre de 1944, a las 4 de la tarde. Su compromiso era “por el tiempo de duración de la guerra y dentro del área metropolitana”. Fue registrado como como tirador (artillero) al 2º Batallón de Marcha de Hérault (80 RI).

Fuente: MdH, 34.26.271
Fecha que coincide con su baja en el maquis y en la fue confirmado como apto para entrar en el ejército . A esta misma unidad se unieron combatientes procedentes de otros maquis. Durante unos días fueron instruidos militarmente y participaron en algunas de las operaciones destinadas a paliar los destrozos que se produjeron durante los combates. Finalmente, el 15 de noviembre partieron al frente de Alsacia. Estuvo en activo desde el 15 de noviembre de 1944 hasta el 7 de marzo de 1945.

Fuente: MdH, 34.26.441
José fue uno de esos muchos resistentes que se alistaron en el ejército pensando que continuaban la lucha que habían iniciado en sus territorios. La situación fue bastante más complicada. La llegada masiva de estos combatientes, convenientes y necesarios para los intereses franceses (también para los aliados que querían desracializar el ejército, en su mayoría procedente de las colonias)[3], no contó, sin embargo, con los recursos necesarios para su formación y equipamiento. Ambas condiciones, especialmente la segunda, se hicieron patentes con la llegada del invierno en las frías tierras del Rhin. En este escenario José coincidió con otro murciano: Andrés Martínez Navarro, de Lorca.
José participó en las operaciones del bosque de HART (sic), en el frente de Alsacia, donde los soldados iban mal equipados, mal vestidos, sin zapatos y con los pies cubiertos de paja atada con cuerdas. La salud de José pronto se resintió. El 22 de diciembre tuvo que ser ingresado en la enfermería por bronquitis, aquejado de dolor en el pulmón. Solicitó el alta el 3 de enero para reincorporarse al frente junto a sus compañeros. Volvió a ser baja (descanso) el 28 de enero de 1945 y, a pesar de su mala salud, volvió al frente el 8 de febrero de 1945 donde se mantuvo hasta el día 18 de ese mes, quedando después en reposo en Bourgfeldie.
José, registrado como voluntario extranjero, fue enviado a casa el 7 de marzo de 1945. Regresó enfermo y decepcionado por no poder servir a su país de adopción. Fue hospitalizado en el hospital de Béziers debido a la pulmonía contraída en el bosque de la Hart. Falleció en diciembre de 1946 “después de haber tenido la satisfacción de naturalizarse francés el 5 de septiembre de 1946”.
Esas condiciones quedaron reflejadas en la carta enviada por el capitán Jouvin, excomandante del Grupo Cabrol:
“Considero, en conciencia, que la causa de su muerte puede atribuirse a una enfermedad contraída en el frente, y si José Cascales hubiera sido enviado a un regimiento en la retaguardia para ser desmovilizado, en lugar de ser devuelto pura y simplemente a su casa, los médicos militares podrían haberle anotado su enfermedad, porque la falta de entrenamiento militar dado a los voluntarios de las FFI no le permitió que su enfermedad le fuera anotada después de su despido”[4].
Jouvin afirmaba que el hecho de que José fuera enviado a su casa sin ser desmovilizado invitaba a pensar que seguía formando parte del ejército francés en posición no activa. Todo ello significa que José no se pudo beneficiar de los derechos propios de cualquier soldado francés.
La esposa, ya viuda, solicitó la pensión de guerra (07/05/1949). Tuvo problemas de toda índole. El primero de ellos fue el desconocimiento del francés y la escasa formación, además de la carencia de recursos para afrontar el complejo proceso. José al regresar del frente no se presentó en un hospital militar para ser reconocido, como hubiera hecho un militar de carrera. Lo hizo en el médico local que le correspondía y fue atendido en el hospital de Béziers. En ningún momento se diagnosticó la enfermedad que padecía en relación con la actividad en el frente. Es decir, oficialmente, para el ejército, no existía, ni siquiera fue desmovilizado, por lo que le fue denegada la pensión. Buscó entonces la ayuda de antiguos compañeros, asociados por entonces en la Amical del Grupo Cabrol. La respuesta fue del capitán JOUVIN, responsable del maquis en el que luchó, quien asumió la apelación del caso.
La resolución del problema tenía que ser por vía judicial, con unos gastos que podían llegar a los 5000 francos. Jouvin le sugirió a la viuda que solicitara ayuda al ayuntamiento de Béziers. En caso de no obtenerla la asumiría la Asociación del Grupo Cabrol y la del 80 RI. No deja de manifestar su sorpresa por el hecho de que tengan que pagar por esta gestión. El proceso seguía abierto en 1949.
Es posible que las gestiones culminaran con éxito y que José y su familia obtuvieran el reconocimiento y compensaciones a las que tenían derecho. Y, probablemente, también lo hiciera la ciudad donde residía incluyendo su nombre en el monumento a los caídos de 1940-44 de Roquessels.

Fuente: https://es.geneanet.org/cementerio/view/1538942/persons/
[1] MdH, 34.26.272-3
[2] Service historique de la Défense, Vincennes GR 16 P 109986
[3] En https://www.etudesheraultaises.fr/publi/les-ffi-heraultais-confrontes-a-lamalgame-1944-1945/
[4] FRAD0_034_220J_4_00019-20